Oncle Jules

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sábado, 17 de abril de 2010

EL PRINCIPIO DEL FIN...





Todo esto ocurrió en áquel tiempo vacío en que el cielo vomitaba extrañas cosas; éra el día de la cólera de Diós. El apocalipsis comenzó con la confusión de los sexos.

Un hombre inmundo y despiadado abusaba sexualmente de una bella y voluptuosa campesina en un bosque. De repente unos militares dispararon al violador en la cabeza y se llevaron a la campesina arrestada; a través de una gran puerta condujeron a la joven hasta un gran palacio y a punta de fusil la obligaron a entrar en él.

-"¡Para el "señorito" será un placer,
retozar con tan hermosa mujer; -dijo uno de los militares, con sorna, a la joven-.
Y al fin dejar de bostezar,
y sus picores calmar!"

El señor marqués al ver entrar a la campesina exclamó:

-"¡Que belleza tan completa, maravillado me siento!;
¡enmedio de la tristeza de un mundo mugriento,
a mis guárdias fidelísimos una incesante búsqueda les he encomendado,
no esperé jamás tal resultado!

¡Pues bién, mujer fascinante: antídoto de la amargura,
¡contigo voy a solazar
en este repulsivo lugar!;
¡en este montón de basura!"

El señor marqués se dirigió con desprecio a la señora marquesa y le habló en estos términos:

-"Y a tí por tu infecundidad te he de repudiar,
el exilio será a partir de ahora tu lugar;
largaros de aquí sin vacilar,
pues solo con veros me entran ganas de vomitar!"

La marquesa tomó una daga envenenada y habló a su marido con gran serenidad:

-"¡Estéril si soy, más no debéis despreciar
a quién de veras os supo amar;
y menos cambiarme por una puta vúlgar!,
¡áquello que ya se tiene seguro
que poco cuesta rechazar!;
¡más sé que és la amargura la que os hace hablar!

¡Pues oíd, "señorito":
para dáros placer
no he vacilado en tratar de poner remedio a vuestro apuro,
meneando con mi mano vuestro miembro cuando estaba duro!;
¡más por vos yo no puedo hacer!

¡La que tanto os quiso ayer,
esta hoja con veneno
introducido ha en su seno,
y se dispone a perecer!

Pero muriéndome os grito:
¡"adiós "señorito",
ingrato y maldito!"

Tras clavarse la daga la marquesa hizo "mutis por el foro"; al ver a su esposa muerta en el suelo el marqués ni si inmutó, lo que hizo fué dirigirse complacido hacia su concubina a la que comenzó a desvestir con premura mientras le hablaba extasiado:

-"¡De sus palabras abobino!,
¡sirvientes, traed vino!;
¡nunca maldiciones de nécio alcanzaron el cielo!";
¡más, bella, no tengais desconsuelo,
pués follarte és lo que yo anhelo!"

El marqués le quitó la braguita a la campesina y contempló con estupor cómo en lúgar de una jugosa vúlva, bajo un vello púbico cálido y rizado, se enarbolaba una erguída y candente verga en estado triunfante.

-"¡Buen chasco me he llevado!, -bramó el marqués, maldiciendo-;
¡qué tomadura de pelo!;
¡la ví y quedé de ella prendado!,
¡quise que ella fuera mi consuelo!,
¡ infinita atracción sentí ante un espejismo!,
¡gozar con ella esperé!;
¡y la decepcción hasta el abismo,
al ver a "uno" que nunca mujer fué!"

¡Sin una mujer con la que solazar,
y sin descendencia que egendrar
con ella pudiere, y así hijos poder tener,
la vida será como vegetar.
¡Mejor morir!,
pero antes, ¡guardias, habeis de defenestrar
a este demonio de "ser",
para que al infierno pueda ír!"

Los guardias cumplieron el mandato y arrojaron al extraño ser hermafrodita por un ventanal; el transexual se precipitó al vacío ántes de espachurrarse definitivamente contra la dura tierra.
El marqués desde una almena lo contempló todo; mientras saboreaba una copa con licor envenenado hizo la última de sus melancólicas reflexiones:

-"¡Vida perra!,
¡la soledad me aterra!;
¡os repudio, Señor, mientras me tomo este pacharán!,
¡mata, veneno cruel a este Adán!,
¡el único que folla normal en la tierra!"

...El fin del comienzo.






viernes, 16 de abril de 2010

UNA CANCIÓN ALEGRE PARA UNA ÉPOCA TRISTE...






"En 1.916, un alemán cansado de la guerra,
dejó en Rhin y se fué a Inglaterra".

-"¡Señores de este país en libertad!, -dijo el aristocrata alemán-;
¿tendrían para mí alguna beldad?;
busco una hembra de grandes pechos blancos,
para atacarla de frente, y por los dos flancos".

-"¡Caramba con "el Fritz", vaya visaje!, -dijo el primer ministo británico-;
confunde "libertad" con "libertinaje"!;
yo tengo una hija encantadora,
pero es pequeña, y virgen, por ahora".

-"¡No, padre!, -dijo la hija del primer ministro-; ¡virgen lo fuí!;
porqué en las trincheras, una noche oscura, me perdí".

Recordatorio de Erich von Stroheim.



LA PROFESIÓN HORIZONTAL Y EL PLACER IMPOSIBLE








En un burdel dos putas disputaban por ver cuál de las dos "computaba" con un diputado con muy mala reputación.

-"¡No puedes tú competir en contra de mi lozanía!";-dijo la más joven de las putas, esputando en la cara de la puta vieja, mientras descubría su hermoso cuerpo; más apretado que los tornillos de un submarino-.

La puta vieja rompió a llorar desconsolada. En verdad te digo, amigo lector, que una cosa son las putas y otra las putadas.










miércoles, 14 de abril de 2010

EL LOBO Y LAS CABRITAS


Un empresario de la construcción que visitaba unas obras, en un percance se golpeó un pié contra un montón de ladrillos; como consecuéncia su zapato quedó destrozado por la punta.
Entonces el empresario se quitó el zapato dañado. En el calcetín que descubrió habían unos tomates enormes; éra un calcetín viejísimo. Por los agujeros del calcetín se podía apreciar lo exageradamente súcios que llevaba los piés; había allí roña adherida desde hacía meses.

La uña del dedo gordo de ése pié había crecido tanto que era fácil adivinar que había sido ella la responsable de la perforación del calcetín.
Los trabajadores estaban aterrados, áquella éra la uña puntiaguda y súcia de la garra trasera de la pata de un lobo.